Por Bruno Pedro
De Alto
Fahrenheit 451 es una novela publicada en 1953 por el
escritor estadounidense Ray Bradbury. El título hace referencia a la
temperatura en la escala de Fahrenheit (°F) a la que el papel de los libros se
inflama y arde, equivalente a 233º C (http://es.wikipedia.org/wiki/Fahrenheit_451).
La novela plantea una contradicción llamativa desde el punto
de vista de la racionalidad: los bomberos tienen la misión de quemar libros ya
que, según el gobierno, leer impide ser felices porque llena de angustia; al
leer, los hombres empiezan a ser diferentes cuando deben ser iguales, lo que es
el objetivo del gobierno, que vela por que los ciudadanos sean felices para que
así no cuestionen sus acciones y los ciudadanos rindan en sus labores.
La parábola es perfecta: quienes deben apagar incendios,
queman libros; y para los gobiernos los libros son fuente de angustia.
Sin duda que usar la parábola del Fahrenheit 451 en sucesos
ocurridos en la UTN Facultad Regional General Pacheco (UTN FRGP), es forzado.
El autoritarismo y necedad del relato, son literarios. La realidad es más
sutil: aunque nos queda cómodo el paralelismo. Ese paralelismo es un recurso, y
si se trata de llamar la atención… es útil.
Nadie ha quemado libros en la UTN FRGP, nadie ha dicho que
los libros generan angustia. Sería una burrada. Pero sin duda, escribir libros
en UTN FRGP, es un paso previo a la incomodidad, a la mala suerte, a perder el
trabajo. Los libros quedan, los autores pasan.
Si un docente quiere ser eyectado rápidamente, que escriba
un libro. La rapidez nombrada, es la que media entre la publicación y la
eyección. Todos saben lo laborioso que es escribir un libro, ese tiempo no
cuenta en lo dicho.
Hay pruebas contundentes para tal afirmación. ¿Cuántos datos
hacen falta para formular una ley social? No estoy seguro, pero tengo tres
datos que dibujan una simpática curva: en
la UTN FRGP escribir libros es yeta.
- Marta Panaia, escribe su “Trayectorias de ingenieros tecnológicos – 2006. Graduados y alumnos en el mercado de trabajo. Colección Educación, crítica y debate”. Un extenso trabajo que surge de las investigaciones del malogrado Proyecto MIG. El libro, costeado por la misma UTN FRGP y editado por la prestigiosa Miño Dávila (http://www.catedras.fsoc.uba.ar/panaia/nueva/espanol/paite-programa/publicaciones/publicaciones01.php), sin duda, generó angustias: en él se decía que la formación de los ingenieros tecnológicos tenía deficiencias y explicaba por qué. Panaia, inocente como todo investigador, imaginó que desde allí se podían ensayar ayudas, soluciones, alternativas de mejora. Pero pocos años después, en una curiosa disputa sobre qué tipo de uso se debía hacer con los datos que revestían la categoría de “secretos”, por el tipo de metodología de recolección, esto es: preguntas personales a personas de carne y hueso a las que se les había prometido esa confidencialidad; Marta y su equipo fueron cesanteados (https://www.facebook.com/notes/utn-pacheco-censura/lo-que-no-se-quiere-dar-a-conocer-en-la-regional-pacheco-qu%C3%A9-paso-con-el-mig/105867956171353). Lo inédito: el gobierno de una Facultad se deshace de un bien intangible de incalculable valor. Todo un equipo de investigadores que llevó años formar, y sobre el cual se invirtió mucho dinero. Es más, tenían mucho para aportar: como se educa en la UTN y donde se podría mejorar.
- Hector Formento, Nestor P. Braidot, Jorge Pittaluga escriben “El Proceso de Mejora Continua en Pymes Argentinas. Investigaciones y modelos posibles”. Un trabajo conjunto de investigación y publicación entre la UTN FRGP y la Universidad Nacional de General Sarmiento (http://www.tematika.com/libros/negocios_y_cs__economicas--10/administracion--1/pymes--7/el_proceso_de_mejora_continua_en_pymes_argentinas--474339.htm). A posteriori, la suerte de estos tres docentes – investigadores se vio afectada y en nada se vieron incluídos en un proceso de mejora continua. El ingeniero Pittaluga, en el año 2009 se distancia de la actual gestión de la UTN FRGP en desacuerdo por la política de firma de convenios que se proponían desde diversos organismos oficiales, para contratar a la Facultad como “consultora preferencial” del Estado; pero se contradecía ese espíritu: la Facultad aceptaba esos convenios con la única finalidad de administrarlos a cambio de un canon económico. Luego de develar esta operatoria, la misma dejó de funcionar y la gestión – enojadísima – empezó a tratar de Pittaluga como traidor. Hoy detenta ese mote, a pesar de sus democráticos mandatos en el Departamento de Ingeniería Mecánica y su 38% de adhesión en la última asamblea regional del 2013. Héctor Formento tampoco disfrutó su obra en UTN FRGP: renunció en solidaridad con el Grupo MIG, donde trabajaba su hija. Finalmente, la mala suerte atrapada por Braidot, cruzó municipio y universidad: el haber escrito un libro en General Pacheco para la UTN FRGP le acarreó la maldición de no haber sido electo rector por un solo voto. El libro citado no es muy extenso, mejor: si no hubiera perdido por más votos.
- Bruno Pedro De Alto escribe y publica en el año 2013 “Autonomía Tecnológica. La audacia de la División Electrónica de Fate” (http://www.ciccus.org.ar/ed/ediciones-ciccus-los-invita-el-proximo-7-de-agosto) En este interesante trabajo se detalla a través de una historia olvidada, el rol del conocimiento tecnológico en la disyuntiva de la autonomía tecnológica nacional, teniendo especial interés en las experiencias universitarias para con el desarrollo tecnológico de la industria nacional. Temas inquietantes para la FRGP, porque – seguramente ya hemos demostrado que hay una ley entre el hecho de escribir libros y el alejamiento compulsivo o aparición de dificultades personales – el autor fue cesanteado, despedido, o dejado sin trabajo el 1° de agosto del 2013. La pertenencia de dicho autor a una agrupación opositora no debió haber influido tanto como el hecho de mostrase como un intelectual capaz de producir un atractivo ensayo sobre políticas de desarrollo tecnológico nacional.
Hay excepciones a la regla. El benemérito y glorioso Doctor
Horacio Bosch, ha sobrevivido a los “bomberos del Farenheit 451”, ha publicado en
FRGP – entre otros trabajos - con éxito (http://www.dunken.com.ar/web2/libreria_detalle.php?id=7259)
y vive para contarlo desde los lustrados laboratorios de Física, pertenecientes
al ordenado Departamento de Ciencias Básicas. Un rincón aliado, lejos del
fuego.
1 comentario:
Bruno. Es doloroso que la gente que genera aportes académicos sean desvinculados de la Facultad por pensar distinto. Hay otros ejemplos de personas que no han escrito un libro y también fueron despedidos. Personas trabajando en investigaciones y que fueron despedidas sin haberles avisado, tal es el caso de Ernesto Souza, despedido sin aviso y luego de dos meses que no recibía el sueldo se notifica por alguien de administración que había sido desafectado de la planta.
Creo que el valor de los actos académicos nunca podrán ser evaluados por personas que no son ni académicos y administradores competentes y desinteresados.
Lamentablemente, la Facultad está gobernada por un decano que solo le importa perdurar, acompañada por un grupo de personas que solo les importa pertenecer. Esto es el resultado de las últimas elecciones. No importa cuál sea el proyecto académico, no importa si se roba o se financia la corrupción de este país a través de convenios fraudulentos, no importa si alguien escribe un libro y brinda aportes académicos. Solo importa mantener el Status Quo, de esta forma, algunos perduran y los otros siguen perteneciendo.
Abrazo, raul
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